El estado Español reclama un céntimo a una desempleada en Tortosa

Una oficina de empleo. Foto: elmundo.es

Ciertamente increíble, que se pierda  tiempo y dinero en todo el tema burocrático de reclamar un puñetero céntimo, que al parecer se abonó, de más, a una parada, en la localidad tarraconense de Tortosa.
Como se puede tener la caradura de reclamar tan ridícula cifra, cuando la clase política está robando millones y millones de euros, y no solo no detienen a toda esta panda de chorizos, sino que además o salen absueltos o bien en el improbable caso de ser declarados culpables no devuelven nada de lo sustraído a todos los españoles.

Al parecer la joven desempleada, siguiendo el que según parece es el procedimiento habitual, recibió en su domicilio una carta certificada, cuyo valor ya supera la cantidad reclamada, donde se le reclamaba la devolución del céntimo que cobró de más en su prestación.
En esa misiva se le recordaba a la chica que sino hacía efectivo el pago, en la entidad bancaria, en el plazo de un mes, la "multa" se incrementaría en un 20%. ¿Alguien me puede decir a cuanto asciende el 20% de un céntimo?. Es que a mí me da pereza calcularlo.

En la carta se le explicaba también, que si pasado el plazo reglamentario de 30 días para realizar el pago voluntario no hubiera efectuado el reintegro "se emitirá la correspondiente certificación de descubierto, por la que se iniciará la vía de apremio, según lo que dispone el artículo 32/2 del Real Decreto 625/1985".

El caso es que aquí no termina la historia, ya que la joven una vez saldada la deuda, tiene bemoles que la chica la abonara, yo personalmente no hubiera pagado y esperaría a ver si son capaces de detenerme por un mísero céntimo, tuvo que ir al INEM con el recibo del banco para hacer ver que había cumplido como ciudadana.
Pero ¡Oh sorpresa!, una vez allí, le dijeron que no podía entregar el recibo ni hacer ningún trámite si no había pedido cita previa, así que tuvo que volver otro día para resolver el problema.
La afectada comentó: “Seguramente, no se hizo más que seguir el procedimiento habitual en otros casos sin tener en cuenta la cuantía, pero algo falla en el funcionamiento de todo el sistema si es necesario gastar seguramente una cantidad bastante mayor para costear la carta certificada y todo el engranaje con el propósito de reclamar un triste céntimo".

Ciertamente que pasen estas cosas es una auténtica vergüenza, que deja retratados a todos los ladrones de corbata que tenemos al mando de este país.

Jesús M. Moreno